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La historia con patas de Valentí Sanjuan #EnvyTalks

Valentí Sanjuan se define a él mismo como un flipado de la vida que se dedica a ir por el mundo corriendo carreras y pruebas “un poco locas”. Una persona que más allá del reto o la parte personal de intentar conseguir alcanzar esas metas, dedica su tiempo y su vida a conocer las “historias con patas” que hay en esa carrera. Personas que por distintas razones están ahí para intentar demostrarse a sí mismos y al mundo, que nada es imposible.

Para este deportista de élite, la vida le ha demostrado que la superación tiene mucho más que ver con intentarlo, que con lograrlo. Lograrlo, como él dice, es la consecuencia, a veces inevitable, que tiene el intentarlo. Las capacidades, la motivación y la fuerza que te impulsan serán claves pero lo más importante para Valentí Sanjuan es el momento cuando te convences a ti mismo de decir “lo voy a intentar y hasta que no lo logre, no paro”. Para Sanjuan, el momento clave de superarse es cuando dices “no hay excusas, no hay problemas, no escucho a nadie, y voy a por ello”.

Todo lo que ahora parece muy bonito y feliz en la vida de este “flipado de la vida”, empieza por varias tristes historias. Y es que la vida de Valentí Sanjuan ha estado marcada por distintas desgracias que le han hecho superarse. De tenerlo todo a no tener casi nada. Ese es el giro que hizo a este ejemplo de persona cambiar el rumbo de su vida. La muerte de su madre le hizo ver que mirar hacia el futuro no siempre es el mejor camino. Y que planificar el mañana ya no tenía demasiado sentido.

Junto con su hermana crearon una lista de las cosas que querían hacer antes de morir y en ella apareció algo que cambiaría su vida para siempre: hacer un Iron Man. Y este fue el comienzo de su nueva vida. A partir de este primer Iron Man en 2013, la vida de Valentí dio un giro 360º y su vida empezó a ser una pura locura, enfrentándose a las carreras más duras donde hace falta prepararse tanto físicamente como mentalmente, y donde las ganas de hacerlo y la motivación no pueden faltar.

De sus carreras más duras, destaca la Madrid-Lisboa, un sueño y una pesadilla al mismo tiempo que tardó tres años en conseguirla. 770km non-stop en Mountain Bike en 55 horas, sin parar, sin dormir y comiendo lo mínimo. Una carrera muy dura físicamente pero sobre todo, mentalmente. Una carrera con la que retó a su propia persona.

Y es que Valentí tiene mucho que enseñarnos. Para él lo importante es encontrar lo que te guste, lo que te haga feliz, lo que te haga brillar los ojos. Encontrar algo por lo que nuestra vida cobre todavía mucho más sentido. Basta con escucharse a sí mismo para descubrir qué es eso que nos hará superarnos.
Encuentra eso que te gusta y dedica tu motivación y ganas a ello. Porque por intentarlo no se pierde nada.

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